El próximo martes 27 de agosto se llevará a cabo a nivel nacional la 7ª Marcha Nacional Contra el Gatillo Fácil y la Impunidad, la reunión será a las 10hs en la plaza Independencia y se dirigirá hacia el poder judicial. Entrevistamos a Ana Sosino. de familiares de víctimas de violencia de Estado. Invitan organismos de derechos humanos y organizaciones sociales y políticas.
Comenzó“… es un orgullo, por lo menos así lo vivimos desde las organizaciones, que 7 años de manera consecutiva se sostenga la movilización en las calles, y la visibilización de las prácticas punitivas, de control, represivas, en nuestra provincia, y que justamente se da en el marco de una marcha nacional… tiene un carácter de denuncia la marcha, como así también de exigencia… exigimos otro tipo de políticas públicas que tengan que ver con la vida, no con el encierro y la muerte…”
Luego nos brindó su mirada de la historia reciente: “… vemos que desde el retorno de la democracia no muchas cosas han cambiado, pero este escenario nacional y provincial se muestra más adverso que otros años… nos encontramos con un código de contravención, con imputados y procesados por luchar, con la criminalización de la protesta… si vos salís a luchar por tus derechos, lo que te puede pasar… En un contexto de desempleo masivo, de recortes y ajustes en educación, en salud, en viviendas ni hablar, en políticas que tengan que ver con la juventud, y un incremento exponencial de la pobreza infantil, aparecen estas medidas punitivas como el intento de bajar la edad de imputabilidad, que es uno de los ejes principales de esta marcha…”
También nos contó sobre su apoyo y guía para sostener los reclamos: “… en los siete documentos que hemos leído al finalizar las marchas, tienen que ver con esto: dejar de negar la historia, que es un pasado reciente, como dicen los ex presos políticos, y que tiene que ver con nuestra identidad, y son justamente los organismos, y específicamente las Abuelas y las Madres las que nos han enseñado a seguir resistiendo y de manera organizada, y que no vamos a bajar los brazos, frente a un gobierno que ha sido explícitamente negacionista, que se jacta de haber visitado a genocidas en las cárceles, de propiciar proyectos para liberar o dar arresto domiciliario de genocidas que ya han sido condenados, de negar los 30.000 desaparecidos, todo esto tiene que ver también con lo que venimos a decir, no vemos desvinculado lo que sucede ahora con lo que sucedió en aquel momento…” Sobre a quiénes se hostiga y se persigue, puntualizó: “…la juventud, la juventud pobre, la juventud trabajadora, los obreros, y también los migrantes que aparecen como los enemigos internos… vemos un discurso de odio que se materializa en las prácticas de la policía…”