Gabriel Escobar Blanco y Agustín Sánchez, abogados de OIKOS, Red Ambiental, intenta frenar el fracking en Malargüe, y en este momento el caso fue elevado a la Corte local. OIKOS, además se promueve acciones para proteger el ambiente, promover la participación, garantizar el derecho a la información sobre las temáticas que atentan contra nuestros bienes comunes.
Se propone conciliación y diálogo para acercar postura sobre algunos temas específicos de la explotación. “No vamos al conflicto, pudiendo llegar a un diálogo. Estamos abriendo un camino porque lo que nos interesa es que el desarrollo sea armónico con el ambiente, por eso decimos que el desarrollo debe ser humano”.
Hay aún incertidumbre, no se conocen los efectos reales y fácticos del Fracking; además es inconstitucional y entra en contradicción con la misión de Irrigación. En la sociedad mendocina hay un fuerte repudio a las actividades de explotación de minería, petróleo y gas, con cualquier método que sea agresivo y utilice el agua, dejando grandes cantidades de residuos y el riesgo de posible contaminación.
“Tenemos que tener responsabilidad intergeneracional, generar participación de las audiencias públicas para ser protagonistas de las decisiones políticas”, arguyen los abogados.
Los efectos del MENDOTRAN: la inversión de las empresas de transporte en tecnología para cuidar el ambiente. “La empresa busca ganar plata, el Estado debe controlar ” Contaminamos más en la medida que hacemos mal las cosas. Se debería invertir en energía y no en combustibles fósiles. y no en 1,2% de las unidades eléctricas, que son más eficientes. ¿Qué sale más caro la salud de la población o las unidades eléctricas, aún con sus 10 años de amortización?
La universidades, los centros de investigación ya han investigado y la información está disponible… ante estos interrogantes las respuestas son simples… “es más barato no invertir en el cuidado del ambiente”, sólo por hoy.