El pasado 30 de septiembre, el Cebja 3-216 rindió homenaje a la destacada escritora mendocina para pasar a llevar su nombre como insignia. En un emotivo acto, las palabras abrazadas a las emociones honraron la memoria y la obra siempre presente de nuestra querida Liliana Bodoc.
Silvia Chiavetta Bodoc, hermana de Liliana Bodoc dijo sentir “un agradecimiento enorme mucha emoción porque Liliana además de escribir amaba profundamente venir a las escuelas, narrar, escuchar” Además refirió saber del proyecto que daría el nombre de su hermana a una institución educativa y “por supuesto hemos dado el consentimiento, sin dudarlo”, refirió y destacó: “Que el nombre de Liliana siga estando donde están los invisibilizados, los marginados, donde necesitamos que la palabra actúe como una bandera de transformación y cambio”.
Por su parte, Penélope León, directora del CEBJA contó de la emoción de ver que se ha hecho presente toda la comunidad educativa, y recordó las palabras de Liliana cuando decía que la educación es un acto de justicia. También invitó a quienes no han podido terminar sus estudios, se acerquen para hacerlo.
Fabián Plaza, docente, se hizo eco de las palabras de Silvia, sobre la importancia de la palabra y consideró que “Liliana nos cedió su nombre, y qué mejor que honrarla con su nombre”.
Además, expresó que Liliana es una persona muy abarcadora, la recordamos constantemente quienes la conocimos y su constante respeto a la otredad. “Su obra habla del amor, el sentir, abrazar, no discriminar, tener tu propia esencia que es el eje de nuestro acto hoy”, sostuvo.
El Cebja Liliana Bodoc se encuentra ubicado en el Barrio San Cayetano, distrito Las Cañas, Guaymallén y comparte edificio con otro colegio, y en conjunto con dos colegios más “formamos un conglomerado educativo”, explicó Penélope.
Abigail Calderón, alumna del CEBJA, dijo que leyó un libro para el acto, consideró que es “una persona muy poética, muy entretenido, con mucha historia, con textos hermosos, es genial, muy lindo”. Abigail, ingresó a la escuela en la pandemia, por un amigo que le aconsejo terminar sus estudios ya que tuvo que interrumpirlos y expresó su agradecimiento a la comunidad docente y a sus compañeros por la calidez humana.
Finalmente, Mariana Herrera Rubia, integrante de la Red de Derechos Humanos, refirió que las palabras de Liliana Bodoc siguen siendo vigentes y recordó que la literatura es trascender y que al ser leída Liliana, vuelve a estar siempre presente.