Nuevamente se abre el reclamo para que el Estado argentino deje de destinar fondos hacia la Religión Católica y peor aún sostenga discursos para mantener a la élite conforme.
Desde La Diaria dialogamos con Dr. Carlos Lombardi quien es miembro de la Red de Sobrevivientes de Abuso Eclesiástico de Argentina. Presentaron un comunicado llamado ‘Que Dios se lo pague o la libertad religiosa’, el Dr. explicó que apuntan a dos escenarios para “concientizar a la opinión pública, dar a conocer temas que hacen al debate público como es esta cuestión el ejercicio de la libertad religiosa puntualmente en el contexto de cuarentena”.
La cúpula eclesiástica en este contexto de aislamiento, hacen presión al gobierno nacional para que dé pase libre a sus actividades. Lombardi agregó que realizan “constantes presiones ante el poder político para que se restablezcan las misas, los eventos religiosos y las aglomeraciones de creyentes en lugares públicos o templos, cuestión que ya el gobierno nacional les ha dicho que por ahora no.”
Intentan realzar la campaña que apunta a la separación del Estado con iglesia, para que dejen de existir preferencia y privilegios entre los cultos. Lombardi hizo referencia sobre el accionar de la iglesia que está pidiendo “donaciones” durante la pandemia. El mismo indicó que “las personas católicas que si bien son ellas las responsables del mantenimiento de su culto y de sus funcionarios, es un momento delicadísimos para andar solicitando un depósito bancario u ofrecerse acercarse a su domicilio particular para buscar el diezmo.”
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