Por Fernando Alvarez
Momentos
Hay momentos y momentos, tiempo para sentarse a tomar unos mates bajo la parra, tiempo para hablar al cuete, y tiempo para hacer lo que hay que hacer.
Entre medio de todo eso, las cosas van pasando.
Se juegan momentos cruciales para el destino de una de las empresas recuperadas más emblemáticas de nuestro país, el Hotel Bauen. Una lucha que hasta el momento nosotros hemos visto pasar muy desde lejos.
Mientras esto sucede, los dueños de la guita gorda se encuentran hoy mejor representados que nunca. Algunos empresarios amigos como Caputo, Lewis, Calcaterra o el mismo Franco Macri han recibido generosas condonaciones (perdones) de deudas, Mientras se les ha aplicado una impresionante (varias veces millonaria en pesos) quita de retenciones, ni hablar de exenciones específicas de impuestos, por ejemplo, para la compra de autos de alta gama.
Porque a pesar de que a todos nosotros nos está yendo peor que antes, algunos datos indicarían que hay algunos compatriotas a los que le está yendo muy bien. Por ejemplo a los 7 máximos millonarios de nuestro país, quienes según la revista Forbes ¡duplicaron! sus fortunas en el primer año de gestión del presidente Mauricio Macri: www.clarin.om/ieco/ranking-forbes-empresarios-ricos-argentina_0_rkxJ2cTsl.html
A nosotros en cambio nuestro presidente, lejos de condonarnos las deudas y regalarnos tierras, nos manda a transformarnos en “emprendedores”, en hacedores de nuestro propio destino. Sin tomar en cuenta que esto es imposible sin un contexto que nos ayude. Hay una imperdible nota de Julian Blejmar que le recomendamos sobre este tema: https://www.pagina12.com.ar/26517-la-ilusion-del-emprendedor
Las Armas del presi
Hasta el momento las armas preferidas de Macri han sido el bolígrafo para firmar decretos y su espada decisiva: el sistema judicial, que ha convalidado cada una de sus decisiones, por polémicas que hayan parecido.
Lamentablemente nunca se generó el paraguas legal para proteger a las empresas recuperadas, desde su nacimiento en el 2001, han vivido siempre en la ilegalidad, hasta ahora se les permitió continuar trabajando con permisos provisorios, y siempre y cuando demostraran que estaban produciendo. A pesar de esto, no pararon de crecer y multiplicarse desde entonces.
Fernanda Lizarraga, vicepresidenta de A.D.O. cuya ley de expropiación sancionada por el congreso fue anulada por la gobernadora Vidal, expresaba: “…si ganamos será justicia. Pero para el empresariado no hay castigo. Le debe millones al Estado, a nosotros, a los proveedores. Pero ni lo obligan a pagar. Y a nosotros nos quieren dejar en la calle. ¿Cómo se entiende?.”
El caso del Bauen es similar, a fines del 2015 consiguen la media sanción para la ley de expropiación en diputados. A fines del 2016 en senadores. A principios del 2017 el presidente vetó la ley. Como si estuviese esperando la orden, poco tiempo después la jueza Paula Hualde ordena el desalojo, uno más de los muchos que han amenazado el trabajo de los obreros del Bauen. Primero lo ordenó para el 14 de abril, después parece que no les pintó reprimir trabajadores en semana santa y lo cambió para el 19 de abril.
Tarde o temprano
Cuando usted lea esta nota, probablemente se haya enterado de lo sucedido con el Bauen y es posible que una lucha épica que lleva 14 años, se haya perdido.
Si los trabajadores del Bauen han podido frenar otro desalojo, entonces todavía estamos a tiempo de comprometernos, de informarnos sobre las luchas de las recuperadas, y conocer ese fenómeno que el mundo viene siguiendo con atención.
Si en lugar de eso, los obreros del Bauen han sido finalmente desalojados después de 14 años de lucha: todos seremos un poco culpables. Por no habernos informado, por no haber participado, por no haber conocido una de las mejores noticias que ha tenido nuestro país en los últimos años: la recuperación de empresas quebradas por empresarios de forma fraudulenta por parte de los trabajadores, con el único objetivo de mantener y aumentar las fuentes de trabajo. Después de haber demostrado que se podía levantar un edificio en ruinas, después de haber saldado las deudas que dejó el empresario con los proveedores, después de haber demostrado que cualquier persona puede gestionar una empresa de forma exitosa y honesta si se organiza con otros, después de haber triplicado la cantidad de puestos de trabajo, después de haber donado su trabajo en un sinfín de acciones solidarias, todo esto sin acceso al crédito, y sin ningún apoyo estatal ni privado. Si después de todo eso, la cooperativa del Bauen ha deja de existir. Entonces lo mejor será sentarse a esperar frente al televisor, y esperar que el tiempo haga con nosotros, lo que tenga que hacer.