EL ETERNAUTA

Héctor Germán Oesterheld nació el 23 de julio de 1919 en Buenos Aires. Geólogo de formación, fue también periodista, escritor, guionista y uno de los grandes impulsores de la historieta en la Argentina. Entre su vasta obra, una se convirtió en símbolo: El Eternauta, publicada originalmente entre 1957 y 1959 en la revista Hora Cero Semanal, con dibujos de Francisco Solano López.

La historia narra una invasión alienígena a la Tierra a través de una nevada mortal que cae sobre Buenos Aires. En medio del caos, un grupo de sobrevivientes —encabezado por Juan Salvo, el Eternauta— organiza la resistencia. Pero El Eternauta fue más que una ficción de ciencia ficción: con el paso del tiempo, y especialmente tras el golpe de Estado de 1976, su lectura adquirió un espesor político que la convirtió en un símbolo de la lucha contra la opresión. Ambientada con fuertes referencias a la ciudad de Buenos Aires en los años cincuenta, la historieta incorporó localismos, personajes reconocibles y un clima de tensión creciente. La nieve tóxica, la muerte silenciosa, la organización clandestina para sobrevivir: todo puede leerse también como una metáfora de los años oscuros que vivió la Argentina bajo dictaduras militares. Oesterheld no fue ajeno a esa violencia. En 1977 fue secuestrado y desaparecido por la dictadura cívico-militar, junto a sus cuatro hijas —Diana, Beatriz, Estela y Marina—, dos de ellas embarazadas. Su destino, como el de tantos otros, permanece hasta hoy sin respuesta.

Pese a la tragedia, su legado permanece. El Eternauta fue traducido, reeditado y adaptado en múltiples ocasiones, y es considerada una de las obras fundamentales de la historieta latinoamericana. Su figura, la del viajero del tiempo atrapado en una espiral de supervivencia, se convirtió en emblema de la resistencia civil y la memoria.Ahora, más de seis décadas después de su primera aparición, El Eternauta regresa en formato de serie. La nueva adaptación podrá verse por streaming a partir del 30 de abril, llevando a nuevas audiencias una historia que no solo marcó la ciencia ficción local, sino también la historia política y cultural de un país.