Esta semana en La Diaria se realizó una comunicación telefónica con Guillermo Carmona, Diputado Nacional por el Frente Para la Victoria, a razón de conocer cuál es la actual situación de los departamentos realizados por el PROCREAR, en terrenos que eran del ferrocarril, en plena Ciudad de Mendoza.
El PROCREAR fue un programa nacional para que dar acceso a la vivienda mediante distintas líneas de crédito hipotecario. Una de ellas, era adquirir un departamento en torres de complejos construidos para tal fin. Entre los requisitos estaba la necesidad de contar con ingresos razonables.
“Desde que asumió Macri se generaron modificaciones sustanciales en el PROCREAR; en el caso de la Ciudad de Mendoza, se encontraba en marcha un complejo entre las calles Tiburcio Benegas y Suipacha. Primero mostró significativas demoras en la concreción y luego empezó a circular la versión de que los departamentos, en lugar de adjudicarse por el sistema del PROCREAR que es como correspondería, tratándose de viviendas construidas por el Estado, iban a ser liberados al mercado: los iban a poner en venta para aquellos que contaran con el dinero suficiente pudieran comprarlos. Ya no con crédito hipotecario, financiado con los recursos de Fondo de Sustentabilidad del ANSES, sino quien ya tuviera la plata. En definitiva, salimos a indagar. Esos departamentos van a terminar en manos de los ricos de Mendoza, o en manos de especuladores inmobiliarios. En ambos casos es indignante cuando hay familias que necesitan vivienda, que tienen posibilidad de acceder un crédito como el PROCREAR”.
Los funcionarios nacionales aceptan que ese será el fin de los complejos de departamentos. Los argumentos que dio en su momento el Intendente de la Ciudad de Mendoza, gran impulsor de esta medida de especulación inmobiliaria, fue que eran departamentos demasiado grandes, que no podía ser que el Estado estuviera subsidiando a quienes no podían pagar la compra de un departamento… El Diputado contrargumenta esto diciendo que “no tienen lujos, que son adecuados a familias, de una superficie razonable, que tienen que ser destinados a personas que no serán subsidiadas, sino que accederían a un crédito y pagarían su vivienda. Los dichos del Intendente fueron ofensivos.”
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