Gabriel Jofré, werkén de la comunidad mapuche Malalweche, participó recientemente en una audiencia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, donde denunció el avance del extractivismo en territorios indígenas y la represión que lo acompaña. “Los desalojos están íntimamente vinculados a la especulación inmobiliaria, al fracking, a la megaminería”, afirmó.
Desde el sur mendocino, Jofré explicó cómo se impone un modelo de saqueo sobre territorios ancestrales mediante distritos mineros, como el de Malargüe, donde “lo que prometen como desarrollo es pura especulación financiera”. También cuestionó el rol del Estado y de las empresas: “Inauguran oficinas petroleras como si fueran escuelas. Ya ni siquiera simulan”.
Jofré subrayó la importancia de la unidad de los pueblos frente al despojo: “La palabra mapuche ya no es solo del pueblo indígena, es una palabra del territorio, donde estamos todos los que defendemos la vida”. Y celebró que las comunidades se reúnan en una audiencia popular el próximo 2 de agosto en Uspallata: “La verdadera discusión está en el pueblo, no en las audiencias truchas en territorio empresarial”.
La lucha, en palabras del werkén, no es solo por los pueblos, sino también por los ríos, los glaciares, las montañas: “Hay que salir del antropoceno. La naturaleza también tiene derechos”.