Durante la mañana de hoy, el Colectivo por la Restitución de Derechos a Sobrevivientes del Próvolo, realizó un concentración en las escalinatas de Tribunales Provinciales en apoyo a les sobrevivientes del Próvolo para denunciar “el trato cruel y sin perspectiva de derechos humanos a les que están siendo sometides sobrevivientes y familiares en las nuevas declaraciones solicitadas por la defensa de las acusadas”.
En comunicación con Julia Morcos nos contó que desde el Comité por la Restitución de Derechos de los Sobrevivientes del Próvolo denuncian “el atropello a los derechos humanos que está sucediendo en esta segunda instancia del juicio donde por pedido de la defensa de las imputadas, sobrevivientes y familiares tienen que declarar nuevamente lo que significa una revictimización y queremos denunciar las condiciones en la que se están dando estas nuevas declaraciones. Hay sobrevivientes que hace cinco semanas consecutivas vienen declarando en jornadas extensas, no se contemplan traslados, tampoco asistencia psicológica y muchos han tenido descompensaciones”.
La Causa Próvolo inicia en Verona (Italia) donde el cura Corradi abusaba a personas sordas que se albergaban en las instituciones, al ser descubierto es trasladado a la Plata donde continúa realizando abusos y a finales de los 90 es trasladado a Mendoza, continuando con su accionar. “Claramente se ve la complicidad de la iglesia católica, en Mendoza hay 4 condenados en la primera instancia del juicio y ahora 9 imputadas más, lo que visibiliza la red de personas que cometían abusos o facilitaban que sucediesen con un modo operandi tremendo. En 2016 en Mendoza una de las sobrevivientes logra expresar lo que sucedía e inicia toda la causa judicial”, recordó Julia Morcos y agregó: “Uno de los curas falleció y lo hizo condenado lo que es muy importante porque se obtuvo justicia. Esto genera un precedente mundial, ya que las causas de abuso sexual eclesiástico en su mayoría no llegan a juicio, se vencen los plazos judiciales, por eso se habla del Próvolo a nivel mundial”.
En relación al ocultamiento y el silencio constante en relación a estos temas por parte de la iglesia católica, Morcos señaló sobre “un accionar sistemático de encubrimiento respecto de los abusos sexuales, cuando son denunciados, los curas son trasladados a países de Latinoamérica o África”.
En este sentido, Morcos dijo: “Este abuso de poder a nivel mundial genera las condiciones para que la iglesia actúe impunemente y no lleguen a tener condena judicial ni social, por eso la importancia del precedente, para que esto nunca más suceda. Muchos chicos tenían solo hipoacusia, pero muchos tenían múltiples discapacidades, lo terrible que eran elegidos ya que provenían de familias con vulnerabilidad económica marcada, familias con limitación en el aprendizaje de la lengua de señas, muchos en zonas rurales de Mendoza, había toda un contexto de vulnerabilidad”.
“Remarcamos la crueldad con la que se esta sometiendo este segundo juicio; como Colectivo conformado por sobrevivientes, familiares y organizaciones hicimos mucho para que la primera instancia del juicio tuviera perspectiva de discapacidad, de género y de derechos humanos. En este segundo juicio nos encontramos en foja cero, están violando absolutamente todos los derechos de las personas con discapacidad que se encuentran declarando y hoy denunciamos esto en la Suprema Corte de Justicia antes el juez, Valerio. Hemos pedido la intervención y que se de lugar a organismos que puedan velar garantizando estos derechos. Han recibido la nota y quedamos en una reunión el próximo jueves, para exigir que se termine con el atropello que están sufriendo”, expresó Julia.
Desde el Colectivo se realizó la entrega de una nota al Ministro de la Suprema Corte de Justicia, José Valerio, exigiendo que se adopten medidas de gestión y organización judicial para que faciliten el acceso a la justicia, con perspectiva de derechos humanos, de género, diversidad y discapacidad.
“Sabemos que Valerio es el encargado de los avances de los juicios orales, por eso recurrimos a él. En este segundo juicio no se deja intervenir a la prensa y entendemos que estos delitos no son de carácter publico y que debemos resguardar la privacidad de sus declaraciones, pero ni siquiera se puede dar cuenta del avance del proceso judicial por ello las familias han querido hacer esta concentración para poder contar los abusos y revictimización departe del poder judicial”, sostuvo Morcos.
Compartimos la entrevista completa en el siguiente enlace: