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El abogado laboralista Pablo Barraza, integrante del equipo jurídico de ATE Nacional, confirmó en diálogo con La Mosquitera que la Justicia dictó una medida cautelar que suspende los efectos del controvertido Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 340/24, el cual buscaba limitar el ejercicio del derecho a huelga en amplios sectores laborales.
La resolución, emitida por una jueza en primera instancia, representa un alivio para los sindicatos y trabajadores que veían en el decreto un intento encubierto del gobierno nacional de eliminar este derecho constitucional, garantizado por el artículo 14 bis de la Constitución y diversos tratados internacionales de derechos humanos.
“El decreto pretendía reducir el derecho a huelga hasta el límite de hacerlo desaparecer”, sostuvo Barraza, y explicó que lo hacía mediante una maniobra que, bajo la apariencia de regular la Marina Mercante, ampliaba arbitrariamente la lista de servicios considerados “esenciales” o “trascendentales”.
De cinco a sesenta actividades restringidas
Según relató el abogado, hasta la sanción del DNU, solo cinco sectores estaban legalmente definidos como servicios esenciales: salud, distribución de agua, energía eléctrica, control aéreo y servicios sanitarios. Estos debían garantizar un 25% de prestación durante medidas de fuerza. Sin embargo, el DNU elevó ese porcentaje al 75% en estos sectores e incorporó otras 60 actividades, incluyendo la educación y la exportación.
“En Mendoza, donde los conflictos salariales en la educación son recurrentes, ¿qué posibilidad real de huelga hay si el 75% del personal debe seguir trabajando?”, cuestionó Barraza.
Un DNU en tela de juicio
La medida cautelar que logró ATE Nacional se basa, entre otros puntos, en que el decreto viola la jerarquía normativa del derecho argentino. “Un decreto no puede modificar una ley, mucho menos la Constitución”, subrayó el abogado, recordando que el Congreso se encuentra en funciones y que el Ejecutivo no puede dictar decretos de necesidad y urgencia salvo en situaciones verdaderamente excepcionales.
“El argumento de urgencia para ampliar la regulación sobre exportaciones, por ejemplo, no se sostiene. No hay justificación más allá de beneficiar intereses concentrados”, apuntó.
La lucha en la justicia y en las calles
La resolución está apelada por el Gobierno, por lo que ahora la Cámara de Apelaciones del Trabajo deberá decidir si la mantiene. Barraza mostró confianza en la Justicia laboral, a diferencia de otras jurisdicciones, por su tradición protectora del trabajador.
“El juez laboral tiene otra formación y una mirada más sensible ante los derechos colectivos”, afirmó, aunque reconoció que el escenario judicial general no está exento de presiones e intereses, como quedó en evidencia en episodios como las visitas de jueces a Lago Escondido.
Un clima social en ebullición
Durante la entrevista, también se abordó el descontento creciente entre los sectores más vulnerables, en particular jubilados, trabajadores estatales y de la salud. Barraza mencionó el conflicto en el Hospital Garrahan, donde hay salarios congelados desde diciembre de 2023, renuncias y protestas limitadas por las restricciones del decreto.
“Hay una forma de gobernar que busca terminar con lo colectivo. Esto no es técnico, es ideológico”, advirtió el abogado. Y agregó: “La gente no llega a fin de mes. Los focos de conflicto son cada vez más visibles, aunque los grandes medios intenten ocultarlos”.
El 3 de junio, en coincidencia con las rondas de jubilados, se realizó una marcha masiva en el Congreso, que finalmente fue cubierta incluso por medios hegemónicos, una señal de que “hay cosas que ya no se pueden tapar”.
Una advertencia sobre el futuro
De cara a las elecciones legislativas, Barraza expresó su preocupación por el avance de fuerzas neoliberales en el Congreso, lo que podría profundizar la agenda de ajuste y regresión de derechos laborales.
“Siempre han buscado debilitar al trabajador individual y al sindicato colectivo. Ya lo vimos en los 90. Si se consolida esa mayoría, el panorama será muy oscuro, pero todavía hay resistencia”, concluyó.