LA ORGANIZACIÓN DEL PUEBLO SIEMPRE DA BUENOS RESULTADO.

Gracias a la vigilia de familiares de Mauricio y organizaciones socioambientales y políticas en el Polo Judicial de Mendoza, se dictó la prisión domiciliaria tras más de 20 días detenido por movilizarse contra la minera San Jorge, sin tener ninguna prueba y sin tener acceso a un médico que acompañe su dolencia ya que Mauricio se encuentra en un delicado estado de salud, agravado por una detención que busca criminalizar la protesta en defensa del agua.

Recordemos que Mauricio fue acusado por Eduardo Vera, empresario de Uspallata que tiene intereses personales en la instalación de la minera San Jorge en las nacientes del Mendoza.

Otro hecho que presionó a su traslado de la Estación Transitoria de Detenidos y Aprehendidos, fue la operación de clavícula que le habían hecho previo a su detención. Pero no fue inmediato, ya que a pesar de que existieron certificados, desde el primer momento en que lo privaron de su libertad, que dictaban que no podía estar en la cárcel, sino en su domicilio, daba la sensación que el fiscal Juan Manuel Sánchez Santander se negaba a reconocer tal situación y parecía ser que la jueza Claudia Daniela Tula Lezcano dilataba el proceso.

Finalmente, el 19 de marzo a las 16:20 hs. fue trasladado por un móvil policial y alojado en la casa de la hermana Natalia Soledad Cornejo.

Para salir debía portar la pulsera tobillera con la cual se le hace un seguimiento satelital para que no se escape del domicilio que le fue asignado. Lo más sorprendente fue que no se encontraba en ningún lugar de Mendoza una pulsera para poder colocarle a Mauricio Cornejo en su tobillo. Y gracias, insistimos, al reclamo popular, se logró, dentro de lo que se puede, un alivio en el calvario que ha tenido que vivir este preso político de nuestra provincia.

Da la sensación que el gobernador, principal responsable de la persecución de los asambleístas por el agua y la defensa de la 7722 es ciego, sordo y mudo con respecto a esta distópica situación.

EL AGUA DE MENDOZA NO SE NEGOCIA, LA 7722 NO SE TOCA.

Escucha toda la cobertura aquí: