LAUTARO CRUCIANI, PRECANDIDATO A INTENDENTE DE GUAYMALLEN

Lautaro Cruciani es precandidato a intendente de Guaymallén, él mismo se presentó:

“Llevo aprox. 7 años en la Secretaría General del Movimiento Evita de Guaymallén, conozco mucho el territorio, el departamento…, hace 4 meses me eligieron como Secretario General del Mov. Evita de la Provincia de Mendoza, y soy coordinador del Instituto de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena…, también soy abogado…”

Nos compartió su análisis de la gestión de gobierno municipal en Guaymallén: “…después de 8 años de gestión… entendemos que no ha traído soluciones estructurales, nosotros vemos un abandono profundo de muchos barrios populares, y la gestión de la obra pública le ha complicado la vida a los vecinos, por ejemplo el Bª Santa Ana parece una zona de guerra hoy…, ves lo que ha sido la obra del carril Nacional que le ha complicado la vida a los comerciantes y también a los consumidores… Entendemos que las obras deben hacerse en beneficio de las personas y no para mostrar que se hace más, porque ahí hay una impostura… no pueden estar 4 años en hacer el carril Godoy Cruz…”

Posteriormente habló del peronismo local: “… los movimientos sociales hemos recuperado esa territorialidad que se ha perdido desde los años dorados en que hemos sido gobierno… y vamos a poner al servicio del Movimiento Nacional Justicialista nuestra territorialidad…”

Respecto del tema inseguridad, expresó: “Ellos dijeron que iban a eliminar la inseguridad… bueno les tengo que decir que no ha sucedido, nos plantean los vecinos que el choreo… está a la orden del día tanto en la zona urbana como en el área rural. Yo entiendo que hay que reducir la frecuencia delictiva de los delitos violentos, que eso es lo principal, y eso se reduce con dos cosas: primero con una política criminal seria, no una política criminal neofascista, racial…, primero que trabaje en la prevención y luego que se ponga en marcha el nervio del estado en la persecución penal; y luego las cárceles que hoy están en muy malas condiciones, deben dejar de ser las escuelas de los delincuentes… para convertirse en centros de capacitación en oficios y en centros educativos, porque se ha comprobado que cuando a la persona se la dota de dignidad, o estudia, o se especializa en un oficio, la tasa de reincidencia es cero…” A continuación afirmó: “El ordenador social es el trabajo, no es el subsidio… el subsidio se debe aplicar en la emergencia, para después pasar a la institucionalización del trabajo, y a dotar a ese trabajo de derechos…”