Así lo sotienen y advierten desde las distintas Asambleas Populares por el Agua Pura en Mendoza, más en estos momentos donde en Mendoza se pretende modificar el Código de Procedimientos Mineros que permitiría al gobierno local, habilitar sin filtros a más de 250 áreas mineras.
Sobre este tema se expresó María Marengo, integrante de la Asamblea Por el Agua Pura, de Maipú, al expresar que desde las asambleas “estamos con mucha preocupación por el avance de la actividad mega minera en la provincia de Mendoza, la mega minería metalífera que está impulsando el gobierno provincial de Alfredo Cornejo, su vicegobernadora Hebe Casado, con un fuerte lobby empresarial y político, con una gran participación en ferias internacionales y en países en busca de inversores”.
Las negociaciones del gobernador, Alfredo Cornejo, a Canadá y Chile, y el viaje de la vicegobernadora, Hebe Casado, a Australia son muestra del fuerte impulso hacia la actividad minera con una afrenta prepotera hacia las históricas luchas que el pueblo mendocino tiene en su haber en defensa del agua pura.
“El fin de semana estuvimos en Uspallata, justamente porque en Uspallata está siempre vigente el proyecto de Minera San Jorge, un proyecto de extracción de cobre en esta localidad de alta montaña, que afectaría enormemente toda la cuenca del río Mendoza, un proyecto que ya ha sido rechazado en múltiples instancias, en todas las instancias administrativas, que puede pasar un proyecto de esta envergadura fue rechazado, sobre todo por la población y por las grandes movilizaciones que en Mendoza hemos tenido en cuanto a este tema”, expresó María y agregó: “Posiblemente la Cámara de Senadores trate la modificación del Código de Procedimientos Mineros, seguramente con una aprobación tal como pasó en Diputados hace algunas semanas atrás, y detrás de este Código de Procedimientos viene también el impulso al Distrito Minero de Malargüe Occidental, un proyecto sumamente grave y ambicioso por parte de la provincia, que habilitaría o que busca habilitar en una sola instancia administrativa, un solo paso por la Legislatura de Mendoza, más de 250 áreas mineras, lo que implica que casi un poco más de la mitad del departamento de Malargüe quedaría afectado en este Distrito Minero. Situaciones de gran peligrosidad para la vida, para el agua y para la salud, y para la economías regionales de la zona”.
Finalmente, María remarcó: “Nosotros decimos desde las Asambleas que Megaminería es saqueo porque la mayoría son empresas transnacionales que dejan muy pocas regalías a las provincias. Megaminería es sequía porque requiere un gran uso del agua que también necesitamos propias para la vida y la producción de alimentos; Megaminería también es contaminación pero sobre todo es desempleo porque a cambio de unos pocos puestos de trabajo especializados, destruyen economías regionales enteras, afectan enormemente los oasis productivos de alimentos de nuestra provincia; y es sobre todo corrupción y lo vemos a diario, no solo en el ámbito de la política partidaria sino también en los medios masivos de comunicación donde estamos viendo una avanzada enorme en cuanto al discurso en favor de la minería metalífera y un ataque sistemático a quienes defendemos los bienes comunes”.