Hace muy pocos días hubo en Barracas, Bs. As., un atentado contra 4 mujeres de las cuales 3 ya murieron. Eso es terrible pero también lo es que no esté todo el país consternado, es más, ni siquiera fue una noticia relevante en la mayoría de los medios. ¿Será porque eran lesbianas? ¿qué nos pasa que desde hace tiempo no valoramos la vida de todas las personas por igual?
Tratamos el tema en nuestro espacio de política, con Liliana Diez, de Politólogas en Red:
Comenzó relatando someramente el hecho: “… es un atentado lesbo-odiante… en donde 4 mujeres vivían en condiciones vulnerables económicamente hablando, un vecino que las venía hostigando hacía rato les puso una bomba casera… produjo un incendio, y el tipo bloqueó la puerta para que las víctimas no pudieran salir de la habitación, por lo tanto hay 3 de las 4 que lamentablemente murieron.”
Luego dio su sensación al respecto: “Si bien todos sabemos que existen personajes que odian, o personajes que están totalmente desquiciados, que se materialice en un contexto que el discurso oficial lo homologa, lo legitima…”
Es importante estar atentos a los mensajes de odio: “… el discurso de odio contra todo, no solamente contra una elección de género, es contra todo lo que sea diferente, la forma de pensar, las carreras… todo es odiado, entonces ¿cuál es la alerta sobre esto? Una persona de a pie puede decir “a mí también me parece mal que haya lesbianas por la calle, pero una cosa es que lo pienses en tu fuero íntimo y otra cosa es que está bien que el odio se materialice… no es el odio la salida. También he escuchado “también hay derecho a odiar” o “odio a los que votaron a Milei”… pero no es la salida reproducir estas lógicas…”
También nos invitó a reflexionar sobre algunas conductas cotidianas bastante comunes, aún sin que seamos asesinos: “…en un grupo de whatsapp, privado, entre amigos, un chiste en privado… podés estar legitimando en lo más íntimo de una persona una pulsión horrible, aunque uno no lo quiera…”
A continuación la entrevista completa, para reflexionar: