Por María del Carmen Verdu – Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional
En el 2014, Lucas Carrasco recibió un herida mortal que le costo la vida de manos de Diego Guzman, policía, empleado del Ministerio de Seguridad, Gobierno de la Provincia de Mendoza. Cinco años después, 2019, tras varios traspiés, demoras y otras yerbas, la Justicia se encuentra dando una resolución, a través de su fallo. Se pidió una condena de 18 años de prisión, para el acusado. La justicia le dio 3 años, 6 veces menos de lo pedido.
Desde La Mosquitera reproducimos algunas de las voces luego del dictamen judicial.
“Cuando asesinaron a Lucas carrasco allá por el 2014, decíamos que mataban a una persona cada 30 horas, hoy decimos cada 21 horas, fíjate (…)”
Ese incremento en la cantidad son miles de casos al ritmo de más de una persona por día y eso que hablamos de la información que se visibiliza, imagínate lo que no toma estado público. La manera en que se ha incrementado todo lo referido a represión estatal en estos 3 años y medio es algo nunca visto desde la dictadura. En los casos en que las gestiones provinciales forman parte de la coalición, las campañas electorales apuntan a voto bala y voto cárcel.
El pOder judicial tiene responsabilidad incluso en el caso de Lucas Carrasco, por mas que hubo un pedido fiscal de 18 años de prisión, la propia figura del ministerio publico, busca disimular la responsabilidad estatal, escondiéndose en la individualidad, omitiendo que Guzman es un policía, que tiene un arma reglamentaria, que interviene como policía y con su escopeta larga un disparo de gas lacrimógeno en una represión alentada. El fiscal pide que se caratule como homicidio simple, es decir lo mismo que te tocaría a vos y a mí. Dicho de otro modo es el homicidio sin el agravante por pertenecer a una fuerza de seguridad como esta contemplado en el Código Penal. Cualquier ciudadano tiene la obligación de no dañar a otro, pero cuando se pertenece a una fuerza de seguridad, el agravante es que ese agente no puede utilizar las herramientas que les provee la fuerza para dañar a otro.
Sabrina Carrasco (hermana de Lucas)
…. Matan a las pibas, atropellaron Natalia Paez, a Lorena Castro, mataron a Exequiel Torres a Willy Gil, mataron a mi hermano, no es la primera vez que pasa esto Mendoza, son muchas las victimas de gatillo fácil, son muchos los casos de violencia institucional y no hacen nada, la justicia nunca hace nada, fíjense todos los casos condenas mínimas todos los casos, 4 años, 3 años excarcelables, los culpables no van a la cárcel. Son asesinos y el sistema judicial los avala y encima nos maltrata a los familiares y nos tratan de violentos, a nosotros ¡¡¡cuando venimos y pedimos justicia como se debe!!!
¿Cuándo los tratan de violentos?
Todo el tiempo nos tratan de violentos, el sistema judicial, los mismos policías que están acá adentro, nos revisan como si fuésemos delincuentes nos ponen una valla de sillas, nos hacen entrar de a doce personas, doce familias mientras ellos son veinte personas, veinte policías cómplices de este policía asesino DIEGO DOMINGO GUZAMAN ZALAZAR. El sistema judicial nos quito una madre también y ahora nos siguen maltratando y entonces ¿qué tenemos que esperar nosotros como familia? ¿Para que sirve pedir justicia???
¿Le sorprende el fallo?
No me sorprende porque el gobernador Alfredo Cornejo salio diciendo por los canales de televisión que nosotros buscábamos plata. Buscamos Justicia, queremos que el ministerio de seguridad meta a estos asesinos presos. Que no maten más. Pero, no… van a seguir apareciendo pibes muertos porque la justicia los deja sueltos.
¿Se piensan que es fácil ver al asesino de tu hijo suelto? Que se nos ríen en la cara? No. No es fácil, es difícil.
¿Cual es la condena que se pedía?
Se pedían dieciocho años, tres años le dieron y no va a ir preso. Están sueltos y son un riesgo para todos nosotros.