Editorial
Cada mes el proceso de hacer la Revista La Mosquitera requiere una organización grupal de cada uno y cada una que somos parte de este proyecto comunicacional histórico. Así, debatimos los temas, quiénes escriben, desde qué perspectiva, qué será la nota central, quiénes se animan a investigar y escribirla; por otro lado, otres contactan a organizaciones para entrevistar sobre alguna realidad que hoy acontece… el Fer Rosas hace la tapa; también se ha sumado otro artista que le pone trazo a nuestras palabras, Révora. Y luego nos damos unos días para escribir cada cual su artículo, compartirlo en el grupo, corregirlo. Diseñar la revista. ¿Hay avisos nuevos, siguen los que están? ¡Uh! Falta la editorial, ¿quién la hace? Luego la Flor avisa por Whatsapp que ya está lista para que revisemos. Se manda a imprimir a la Imprenta del Ariel. A los dos o tres días, ya está lista para retirar. Va la Vale, la busca, la lleva a alguna casa. Nos juntamos… la Luisa, la Elena, la Laura, el Rubén, el Fer, la Ani y si estamos de buenas el Roberto y hasta el Edgardo… mates y cosas ricas de por medio, intercalamos los pliegos, doblamos, abrochamos.
A veces refunfuñamos por tanto trabajo… sin embargo por estos meses nos faltan esos encuentros. La calidez, el abrazo de llegada, las charlas, tantas risas, discusiones de todos los colores…
Pero La Revista sale igual, en formato digital, y a color. Sin la magia del papel, pero con el compromiso de siempre. Porque en este mundo patas para arriba, qué mejor que aprovechar para sacudirnos y repensar nuestra existencia en el mundo, como especie, como individuos.
El sistema capitalista que mueve el mundo se ha quedado sin respuestas. Hace rato ya se demostró que se hunde; pero ojo, que el capitalismo tirano se reinventa a fuerza de miedo y avaricia. Cada minuto mata al planeta y las desigualdades se agrandan. Pero los grupos poderosos tienen comodines y trampas.
La pandemia de COVID-19 es el momento histórico que nos toca. Se enfría la economía y el mundo natural respira, se decretan cuarentenas y aislamiento, se fuerzan las instituciones a sobrevivir y reinventarse, millones de familias en todo el planeta no comen, millones pierden su trabajo, miles de mujeres son asesinadas en el seno de sus propios hogares sólo por ser mujeres. Pero acaso ¿antes del Coronavirus no pasaba lo mismo? Este año, y no sabemos hasta cuándo, se visibiliza lo más oscuro de nuestra sociedad, y los valores más dignos. Ante la realidad de ser elenco protagónico de un hecho tan trascendente, invitamos a generarnos interrogantes. Luego el tiempo permitirá llevar nuestras incertidumbres a algunas respuestas. O quizás, no.
Eso es la Revista de abril, la N° 148… una invitación a hacernos preguntas, en la calma de este tiempo sin reloj. Preguntas que no tienen respuesta, pero el sólo hecho de hacerlas, nos permite pensar.
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