Próximos a la segunda sentencia por el caso Próvolo, recibimos en la radio a Marcela Orellana quien es mamá de una víctima del instituto, dialogamos de varios temas, comenzando con las redes de apoyos.
“Bueno la Red de Sobrevivientes de abusos eclesiásticos de la Argentina ya tiene 10 años, trabaja activamente para dar contención, asesoramiento, a quienes han sufrido abusos eclesiásticos, es un abuso institucional puesto que se da en un contexto de instituciones religiosas que pueden ser parroquias, colegios, conventos… son abusos que implican siempre abusos de poder… se da una serie de abusos que se cruzan, como el abuso de conciencia, el abuso psicológico, el abuso sexual, tiene varios componentes no siempre están todos… deja secuelas para toda la vida.”
Y sobre esta segunda sentencia, expresó: “… es emblemática… esperemos que sea otra sentencia histórica, los ojos del mundo están puestos en Mendoza, porque el Próvolo es una mega causa por la cantidad de imputados e imputadas, por la cantidad de víctimas, la cantidad de audiencias, la duración de los juicios… “
Para luego comentar algunos aspectos de los hechos juzgados: “… pensar que alguien se le de una reprimenda, se ponga en una penitencia, se lo ponga en un retiro para que reflexione, y luego se lo premie con trasladarlo a otro lugar y en ese lugar siga depredando, que es lo que ha pasado en esta causa… eso es lo que sustenta la sistematicidad de ese abuso eclesiástico en el mundo… por cada abusador hay un encubridor, un obispo encubridor, una autoridad que es la que guardando la imagen de la institución, permite, agiliza, se ocupa de trasladar para que todo quede callado…”
