La audiencia en la Corte Provincial decidió el sobreseimiento de Ángel Basile, comunicador popular. Nuestro compañero de Radio La Mosquitera, pese a haber invocado su condición de periodista, había sido violentado y conducido en un móvil policial, junto a una decena de personas, a la Comisaría 3 de Capital.
Hace un poco más de un año los trabajadores municipales de capital se congregaron para manifestarse debido a la precariedad del trabajo y un aumento del salario porque era unos de los pocos rubros que nunca paró durante la pandemia. La cobertura del hecho la realizaba el compañero Ángel Basile tratando de dar la voz, prestar el micrófono para que se pudiera conocer esta situación. Esta medida se llevó a cabo respetando las medidas sanitarias estipuladas en ese entonces, pero la fuerza policial comenzó a reprimir violentamente a todos los trabajadores y trabajadores. Se llevaron detenidos a más de 30 manifestantes y entre ellos a Ángel a pesar que mostró sus credenciales como parte de prensa.
En comunicación con Julieta Lavarello nos da su perspectiva y análisis sobre los hechos ocurridos, desacredita la legalidad de los hechos “el pésimo accionar de la policía que fue protegido por el poder judicial”. Todos los hechos ocurridos ese día ninguno estuvo fuera de la ley, los primeros que avanzaron con una orden de aprehensión y represión fueron los oficiales. Nos cuenta que se han realizado varias denuncias por el accionar policial fuera de la ley, no se tomó ninguna medida.
“Es evidente que existe una doble vara, se mide con una vara a la gente trabajadora y con otra a la policía”
En el caso de Ángel, el sobreseimiento se dio porque pudimos demostrar que él se encontraba realmente cumpliendo su función como prensa. Esto lo logramos un año después de la aprehensión ilegal. Analiza Julieta que hay “una clara intención del gobierno, del poder ejecutivo y el poder judicial de impedir a la gente, aprovechando la pandemia, se manifieste pacífica y legalmente.”
“fue una medida para intimidar a los trabajadores”
Durante la represión se llevaron a 36 personas, entre ellos gremialista que se solidarizaba con la protesta, y un peatón que realizaba sus compras cotidianas. Hay claras violaciones a distintos derechos. Pero para agravar la ineptitud de los policías sometieron a todes en un mismo lugar violando al Art. 205 del código penal que es propagar o tener conductas tendientes a propagar una epidemia. Obligar a tantas personas, sometidas en un lugar reducido es una clara falta a este artículo.
Aclara Lavarello, existen varias personas detenidas de manera irregular o arbitraria por violar las normas de la pandemia pero la mayoría de los casos no se ha continuado adelante con las imputaciones y con las acusaciones. “El gobierno ha seleccionado, específicamente aquellos casos en los cuales sirve continuar con las investigaciones para dar un mensajes de poder a la sociedad”. Cuando la noticia llegó a escala nacional, porque fue gravísimo lo que sucedió, recién se hizo eco en los medios locales más grandes que tenemos en la provincia.
Escuchá la entrevista:
El jucio, sin embargo sigue. Te invitamos a escuchar también la entrevista a Rolando Cortez, trabajador que sigue con el juicio sobre sus espaldas.