La llegada a Mendoza del ex Presidente Bartolomé Mitre en 1883 primero, y luego la de Figueroa Alcorta en 1910, son dos momentos ideales para utilizar como prismas para ver la realidad provinciana.
La visita del primero, fue en un proceso de transición entre lo tradicional y lo moderno, se pude observar como la Gran Inmigración comienza a potenciar la provincia luego del terremoto de 1861.
Figueroa Alcorta en 1910, 27 años después que Mitre, observó lo que el ferrocarril y los inmigrantes desarrollaron en la provincia, que lejos de ser una provincia sin problemas sociales, evidenciaba síntomas del progreso de la época.
De esas cosas, y los motivos de esas visitas habla esta columna de Sergio Eshler