ATAQUE A LA CULTURA Y LA DIVERSIDAD

Durante la madrugada del 9 de marzo hubo un ataque al espacio cultural “Casa Azul”, ubicado en San Luis. El Gobierno y los medios no atienden la situación.

Desde La Diaria dialogamos con Martin, integrante de Casa Azul quien vivencio en primera persona el ataque. El entrevistado explicó sobre el espacio que “es una casa que existe desde hace 10 años, 11 años casi, acá en San Luis; es un espacio independiente que apunta a abrir sus puertas a propuestas artísticas y culturales que no tienen tantos recorridos en otros lugares.” Continuó diciendo “ósea una propuesta más amplia y experimental. En este sentido, siempre le abrió las puertas a las colectivas que trabajan desde la diversidad.”

Además Martin mencionó que nunca habían tenido alguna situación similar en el lugar  “en estos 10 años nunca tuvimos problemas, salvo diciembre del año pasado donde un día sábado por la tarde aparecieron unas pintadas en la facha de la casa; donde pusieron consignas como ‘traga sable’ y ‘puto’, además pintaron una estrella de David en la fachada.” Sin embargo no taparon las pintadas y decidieron intervenirlas; el entrevistado dijo “ante eso lo que se nos ocurre es no borrarlo (…) sino resignificarlo y trasformar ese mensaje odiador, de manera irónica también, en un mensaje amoroso. Si nos dicen putos le ponemos mucho más color y que sea más puto todavía.”

Pero el atentado de diciembre no fue el ultimó y hace unos días sufrieron otro. Martin expresó “el martes a la madrugada, después del 8M  tipo de la mañana (…) nos despertamos con un estruendo de un vidrio roto.” E indicó  “cuando estoy saliendo a la calle veo debajo de la puerta una luz naranja, cuando abro la puerta veo un montón de cartones prendidos fuegos, lo primero que hago es sacarlos a la calle y luego entro nuevamente saco el celular y firmo el primer video.”

Para hacer un análisis de todos los daños el entrevistado sumó “han pintado nuevamente el frente y han roto el vidrio de una vidriera que está al lado de Casa Azul. También han traído también desde la Plaza Pringles, que es la plaza principal de San Luis, una placa que se había instalado en la memoria de Azul Montoro una trans que habían matado en Córdoba en el 2017.”