VENDIMIA PARA POCOS

En Junín pagan 11 pesos el tacho de uva. Mientras se produce el desfile vendimial, late profunda una cruda realidad que viven a diario las y los cosechadoras de nuestra tierra.

 

“Este año ha sido medio complicado porque la uva no se podía vender, no había bodegas que pudieran comprarla… después se empezó y ahora con el tema del tiempo estamos medio parados, pero como todos los años, una se adapta, ya estamos acostumbrados a estas cosas”, relata Susana Rivera, cosechadora mendocina.

Andar todo el día entre las hileras para ganarse el día, que a veces se gana y a veces no, sorteando las vicisitudes del tiempo y las mezquindades de los poderosos que fijan a su antojo el valor del trabajo. “Nosotros cobramos la ficha y cada sábado nos pagan, nos cambian las fichas y nos pagan semanalmente. Esta semana ha sido complicada porque lunes y martes tuvimos feriado y hoy no podemos trabajar por la lluvia. Y la uva que tuvimos el día miércoles no estaba muy buena así que no rindió mucho”,  describe Susana sobre esta semana en particular, donde Mendoza estalla en las pantallas nacionales e internacionales ocultando esta realdad, la de las y los trabajadores que cobran entre 10 y 12 pesos el techo.

Las mujeres en la viña son las peores pagas si consideramos que las tareas de cuidado siempre recaen sobre sus espaldas y es un aspecto que aún no se reconoce. Sobre este aspecto Susana dice: “Nunca se ha reconocido… hay chicos que no tenemos dónde dejarlos,  que están en la cuadrilla, no trabajando, pero sí sentado en la punta de la hilera, jugando, pasando el mismo calor que nosotros.

Con respecto a la decisión del gobierno de ofrecer mil millones de pesos a los grandes bodegueros para regularizar sus deudas Susana valoró: “Da mucha impotencia porque nosotros somos los que trabajamos la tierra, los que cosechamos, lo que trabajamos al sol y ellos son los que ganan y encima dependemos del precio que le van a poner a la uva, si la reciben o no. Nosotros somos los que ganamos la miseria”.

Sobre el espectáculo que se monta en torno a vendimia y el desfile político de estos días, Susana expresó: “Te da mucha bronca porque te ponés a pensar que somos nosotros mismos los que los elegimos y somos por los que menos trabajan y se preocupan. La fiesta en sí no tiene sentido, en los que menos piensan es en nosotros, en los que trabajamos. Las que están de reinas tampoco son como las de antes, porque no creo que hayan cosechado un racimo de uva realmente”.

“La fiesta es pura cháchara, porque es todo para los ricos para el que puede ir y pagarse una entrada. Los funcionarios nunca piensan en los que realmente trabajan, piensan en llenarse sus bolsillos, porque si realmente pensaran en nosotros tendrían que venir y ver lo que nosotros hacemos. Ellos tienen su sueldo permanente, nosotros no. El sueldo del trabajador de la viña no es como debe ser, no estamos valorados por el trabajo que hacemos”,  finalizó Susana.

Compartimos la entrevista completa en el siguiente enlace: