HACIA UNA NUEVA LEY DE ECONOMÍA POPULAR Y CON PERSPECTIVA DE GÉNERO

En el marco del 10° Aniversario de la sanción de la Ley Nº 8435 de Promoción de la Economía Social y Solidaria, la dirección de economía social junto a organizaciones sociales, productores y productoras realizan encuentros en vistas de la elaboración de una nueva ley de economía social, solidaria y popular, de construcción colectiva, que contemple medidas necesarias a incorporar en las normativas vigentes del sector.

El proyecto de ley fue presentado el pasado 14 de junio y propone una modificación de la Ley Nº 8.435 de Promoción de la Economía Social y Solidaria con el propósito de generar una adecuación de las Compras Públicas, incluyendo al sector, a través de la modificación de la Ley N° 8.706 de Administración Financiera; adecuación presupuestaria para la implementación de una política pública eficaz, mediante la modificación de la Ley de Presupuesto de la provincia, que contemple las modificaciones detalladas en la propuesta de modificación de la Ley 8.435, entre otros aspectos.

El pasado 10 de junio se realizó un nuevo encuentro de integrantes del Sector de la Economía Social en el Auditorio Ángel Bustelo en donde participaron referentes de la Economía Popular.

“Para nosotros es un festejo porque no solo que pudimos hacer la ley y en su momento festejamos sino que también la seguimos debatiendo, reformulando y actualizando”, comentó María Laura “Pupi” Palero, integrante del Sindicato de Amas de Casa (SACRA) al poner en valor el recorrido del Foro de Economía Social en estos 10 años de construcción colectiva. “Rescatando esa historia vemos ahora todo lo que tenemos que proponer para la nueva ley. Los nuevos enfoques no pueden dejar de ver todo lo que nos sucedió en estos dos últimos años en el mundo: una pandemia donde la economía se enfrió y lo que menos se enfrió fue la economía del cuidado, la economía en la que participamos las mujeres… entonces eso tiene que ser tenido en cuenta porque también somos capaces de conformar organizaciones para dar servicio y para revalorizar ese trabajo y esa tarea”.

“Por otro lado también rescatar las políticas de microcrédito porque después de esa época casi no hubo más… tuvo su furor en el 2010 y después se cayó, y desde el punto de vista de la política social son de los mejores programas que hemos conocido, si bien está la Comisión Nacional del Microcrédito no hay presupuesto para las organizaciones y las experiencias de la economía social por lo menos en Mendoza”, señaló Pupi y destacó: “Y por supuesto, el presupuesto debe tener perspectiva de género, que los registros de la economía popular y solidaria consideren la información que se necesita para tener enfoque de género”.

Graciela, integrante de SACRA comentó sobre la iniciativa en la que trabajan: “Desde el Sindicato, que nos conformamos en el 2016 tomando la posta del que ya existía… pensamos en qué modelo de organización nos podía agrupar para poder proponer trabajo entre las mujeres que conformamos el sindicato y apareció el formato de mutual y el nombre es La Nosotredad, que habla de nosotras y las otras..., obtuvimos la matrícula y de ahí buscar qué es lo que podemos brindar, Hoy estamos con un proyecto de capacitación que tiene que ver con el fortalecimiento de proyectos de la economía popular que se fue dando en todo el país de manera virtual”. Además Graciela destacó que actualmente, se encuentran trabajando en otro proyecto aprobado por el Fondo Internacional de Mujeres del Sur.

Del encuentro del la Economía Popular participaron diferentes experiencias dentro del campo de la Economía Popular, una buena oportunidad para conocer la labor de nuestras hacedores y hacedoras.

Uno de ellos fue Remigio Villegas, productor del cuero de Gustavo André (Lavalle), que relató sobre el aprendizaje en su labor de 40 años heredada de su padre y madre. “El cuero lleva un proceso largo porque primero hay que dejarlo secar, estirarlo bien y según para lo que vaya hacer es el proceso que lleva… hay que porque ejemplo curtirlo, rebajarlo, lleva mucho tiempo proceso de trabajo para recién empezar a hacer la pieza”

Desde General Alvear, Andrea compartió la historia que la encontró con la arcilla en una taller municipal para luego crear sus trabajo de cerámica: “Hace cinco años, en un Centro Comunitario para el Trabajo publicaron una capacitación en cerámica y había sido un rubro que siempre quise hacer… cuando me encontré sin trabajo, empecé a estudiar, y después de estudiar dos años empecé con mi emprendimiento”. Su propuesta se llama Mano a Mano y contiene una variedad de propuestas moldeadas desde la arcilla.

Desde la Cooperativa de Recuperados Mendoza (Coreme), Celeste compartió sobre la tarea las y los recuperadores locales y la articulación con diferentes organismos para la recuperación del material para transformarlos en juguetes, libros y otros elemento: “La cooperativa empezó en el 2007 y en el 2016 nos adjudicaron el galpón en comodato, y con un proyecto con el que se hizo el galpón y se compró maquinaria para mejorar las condiciones de trabajo para los recuperadores”.

Desde San Martín, Graciela compartió su emprendimiento “Mimos de Lanas”. “Mi producción son todos tejidos artesanales: pashminas, chalecos, gorros, bufanda, cuellos infinito, ropa de bebé, amigurumis… todo lo que se puede hacer con lana...”.

También la juventud se hizo presento con Juan, Guada y Axel, estudiantes del Liceo Agrícola y Enológico Domingo Faustino Sarmiento compartiendo la producción que realizan desde esa institución. “Es un proyecto donde toda la producción del Liceo es una manera de venderlo a la población de Mendoza o del mundo si se puede”. Vinos, chocolates, jaleas, miel y vegetales agroecológicos fueron algunos de los productos expuestos por les estudiantes.