Por Fernando Álvarez
Análisis visionario
En el año 2004 apareció un libro visionario realizado por la cooperativa comunicacional Lavaca, que se llamaba “El fin del periodismo y otras buenas noticias”, como lo indica su título, en este libro se hacía un análisis que detallaba cómo se avanzaba hacia la muerte del periodismo tal y como lo conocíamos. La web, los hackers, la concentración, la transformación de los medios en armas de presión y brazos armados de corporaciones económicas que los usan para negociar poder , y otra serie de factores, habían provocado que el objetivo principal de los medios de comunicación ya no fuera buscar la verdad, sino negociar el silencio.
Los conglomerados mediáticos (grandes empresas dueñas de canales de t.v, radios, revistas, diarios, etc) conocen su poder de fuego. Ya no interesa tanto contarnos lo que está sucediendo como mantenernos entretenidos, pasivos – aunque intranquilos – para poder explicarnos quiénes son los enemigos de la sociedad, que no casualmente también son los propios enemigos de esos pulpos de la comunicación.
En estos nuevos tiempos, los grandes conglomerados mediáticos viven más de lo que callan, que de lo que publican.
El libro de la cooperativa Lavaca se dedica luego a buscar lo nuevo, que aún no termina de nacer y lo encuentra en un largo compendio de proyectos editoriales autogestivos, principalmente de que ya en aquel lejano 2004 se planteaban como una novedad en cuanto a contenido y visiones renovadas. Este relevamiento se hace sobre Buenos Aires y algunos proyectos editoriales de Córdoba, Chaco, La Rioja y Santa Fe. Le recordamos que este interesante libro se puede descargar gratuitamente desde el portal de Lavaca.
Lo nuevo por nacer
Mucha agua ha corrido bajo el puente desde aquel lejano 2004. Muchos proyectos editoriales autogestivos han surgido, otros han caído y algunos se reconvirtieron, pero algo si es cierto, cada vez son más, a lo largo y ancho del país, sin duda alguna hay un espacio vacío que alguien debe llenar, mucha gente – cada vez más – sabe que para enterarse de ciertas cosas que están sucediendo, en la política, la cultura y la sociedad, hay que buscar, en blogs, revistas digitales, hojas sueltas, fotocopias, en las paredes.
En este contexto actual de avance del neoliberalismo se produjo en el marco del Encuentro de los trabajadores de la economía social, un foro de intercambio de medios cooperativos y autogestivos, del que surgieron algunas certezas: la necesidad de unirse y generar cada vez mas redes, para apoyarse en este contexto de achicamiento económico generalizado, la certeza de que los medios alternativos son hoy los garantes de la pluralidad de voces, y por lo tanto de la defensa del derecho que todos tenemos a la comunicación.
Y para poder garantizar ese derecho es imprescindible que el Estado ocupe su lugar activo y deje de ser chantajeado por los grandes grupos mediáticos. Para esto se debe regular, se deben hacer leyes, 2 son las que reclaman los medios alternativos: La Ley de Pauta, porque usted no se da una idea de la cantidad de dinero que usted paga en impuestos y que van a parar discrecionalmente a las manos de los grandes medios. Y la otra ley que regule la publicación de revistas. Para esto la asociación de revistas independientes de Argentina hizo una concentración, seguida muy de cerca por la policía, en la que reclamaron a los legisladores:
“ (El) …Congreso de la Nación tiene una deuda… Es una deuda tan grande como la concentración mediática que generó el imperio de las presiones, extorsiones y prebendas, el monopolio del papel, la mafia que destroza el mercado de la distribución, que es la misma que patotea a canillitas y recorridos, intentando así controlar qué publicaciones vamos a poder ver en los kioscos y cuáles no. Son las mismas mafias que se llevan el 60% de la tajada de la pauta oficial y las mismas que convierten al periodismo en un centro de operaciones de prensa de los gobiernos de turno. Ustedes, diputadas, diputados, senadoras y senadores, son cómplices de este desguace de la libertad de expresión. Esa es la dimensión de su deuda. Tan enorme, que achica peligrosamente a la democracia que ustedes dicen representar. Nosotras, revistas culturales independientes y autogestionadas, exigimos una ley de fomento. Exigimos una ley que garantice la comunicación democrática. Exigimos, señoras y señores, legisladores, que cumplan con su trabajo, porque esa es su obligación y nuestro derecho”. Fuente Mú – Revista Lavaca
Esta humilde revista que usted tiene entre sus manos, es parte de ese enorme universo de publicaciones independientes y comunitarias que se hacen, a puro pulmón, sin buscar ningún beneficio económico y con el único objetivo defender la idea de que una comunicación más plural y democrática es fundamental para conseguir un mundo mejor. Ojalá algún día esta necesidad se vea reflejada en alguna plataforma política.