En vísperas de lo que en el calendario se conoce como el “Día Internacional de los Trabajadores y las Trabajadoras”, está lejos… cada vez más lejos de ser un día festivo para muchas y muchos laburantes en nuestro país, que hoy se encuentran resistiendo desde lo que va quedando de sus puestos laborales como es el caso del Instituto Nacional de Agricultura Familiar Campesina e Indígena, ante la falta de políticas públicas para el sector y la violencia para con los y las trabajadoras.
“Hemos tenido un plan de lucha que se ha sostenido desde el mismísimo momento en que el vocero presidencial anunció o amenazó con el cierre de nuestra institución. Y hoy día hay una delegación de compañeros que se está llegando a Capital desde distintos puntos del país para exigir reunirse con la que ha sido nombrada hace poco menos de un mes, el 3 de abril, como interventora de la institución”, relató Amalia Guisasola, trabajadora y delegada de ATE en Mendoza y contextualizó al decir: “A nosotros, el 27 de marzo, en pleno fin de semana extralargo de Semana Santa y feriado por la soberanía Malvinas lo que terminó pasándonos a nosotros es que nos cortaron cualquier acceso a nuestros métodos de trabajo, nuestras herramientas de trabajo, nos sacaron del sistema electrónico con el que seguimos expedientes, nos negaron el ingreso a nuestros correos electrónicos, por lo tanto, quedamos absolutamente en silencio con la patronal, patronal que desde que asumió mi ley hasta esa fecha no había aparecido. Y ahora, hace un mes que tenemos una interventora que entre sus funciones tiene que evaluar la dotación del personal, el equipamiento con el que resta la institución y evaluar las políticas que ha desempeñado y hasta ahora no se ha reunido con los trabajadores y las trabajadoras”.
A la espera de una reunión con Inés Liendo -interventora del Instituto Nacional de la Agricultura Familiar, Campesina e Indígena- las y los delegados de ATE buscan soluciones ante la inestabilidad laboral y la falta de claridad de la situación que atraviesan las y los trabajadores de INAFCI en todo el país. “Esta persona pareciera que va a hacer un trabajo de achicamiento pero respecto de las políticas hacia el sector seguimos con profundísima preocupación porque seguimos trabajando, seguimos sosteniéndo vacunaciones contra brucelosis en el campo, seguimos haciendo ferias, talleres… y esta persona no está planteando ni políticas ni nos está avisando si seguimos en relación de dependencia con la institución lo que nos parece irresponsable para el sector y violento para los y las trabajadoras”, destacó Amalia y agregó que el plan de lucha continúa hasta mediados del mes de mayo.